Todo por culpa de una pelota maldita
Una pelota, una jugada, un segundo. Sólo eso bastó para que Colo Colo se desmoronará y quedara eliminado de Copa Libertadores de América. Se armó un equipo para ser campeón, pero terminó siendo eliminado en primera ronda y de la forma más dolorosa: en el último minuto.
El camino comenzó muy mal, con una derrota de local ante Sport Recife, pero poco a poco la suerte comenzó a mejorar. Colo Colo venció a Palmeiras en Brasil y luego goleó a Liga Deportiva Universitaria en el Monumental. Con aquellas victorias se devolvió la ilusión a la hinchada, más aún con el empate conseguido en Quito sobre el final ante LDU.
Se sabían los problemas dentro del camarín. Algunos jugadores insignes no querían a Bartticciotto en el banco, por lo que decidieron hacerle la "cama" y obligarlo a renunciar. Así, el trasandino nacionalizado dejó el Cacique y asumió Gualberto Jara. Lo que parecía una clasificación segura a octavos de final terminó siendo un calvario y, lo que es peor aún, terminó con un proceso.
Vino la derrota ante Sport Recife y luego un partido que ningún hincha albo quiere recordar: la derrota con Palmeiras. En ese partido, el Cacique fue superado en todas las líneas y no soportó el pressing impuesto por el cuadro carioca. Hace mucho que no se veía a un Colo Colo tan inferior a su rival y tanto aguantar el empate terminó jugando una mala pasada, porque a los 87 minutos Cleiton mató las aspiraciones albas.
Un empate le bastaba a Colo Colo para inscribir su nombre en octavos de final. Lamentablemente para el fútbol chileno no lo consiguió y terminó siendo eliminado en octavos. Las burlas por parte de los hinchas de la U no tardaron en llegar y, lo que es aún peor, las pifias de sus propios simpatizantes tampoco. Los mismos que hace 2 semanas aplaudían a sus jugadores por su victoria ante la Universidad de Chile, terminaron chiflando y pidiendo la salida de "todos".
Han sido meses agitados. Sin dudas, 4 meses eternos para Colo Colo, en donde conocieron la palabra fracaso. Hoy están eliminados de la Copa Libertadores y, posiblemente, de los Play Offs del Torneo de Apertura. Pero son situaciones que ocurren en todos los clubes, por lo que no hay que volverse locos ni dramatizar. Con esta profunda crisis se acabó un proceso muy exitoso, en donde el equipo albo lo ganó todo. Ahora nada más queda reorganizarse y planificar de una mejor manera lo que será el segundo semestre. Es el momento indicado para comenzar de cero un nuevo proceso, con nuevos líderes y con la esperanza que más temprano que tarde los tiempos de gloria regresarán.
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