Para ustedes exitistas
Colo Colo es campeón. Sí, la estrella número 28 en su historia consiguió el cacique al derrotar por 3 a 1 a Palestino en el estadio Monumental. Alegría para flaites, delincuentes, pokemones del msn y empresarios que sólo quieren lucrar. La marraqueta será más dulce para los golosos y esta noche todos tendrán en sus nick TE AMO ALBO, SIEMPRE HE ESTADO CONTIGO. Un viejo y repetido chiste...El primer lapso fue muy parejo y de gran nivel. Los albos comenzaron gracias a la movilidad que lograban Rodrigo Millar y Macnelly Torres en medio terreno. Daúd Gazale, además, procuraba moverse por todo el frente del ataque para generar los espacios que necesitaba Lucas Barrios para convertir. Sin embargo, el trasandino no estuvo fino y en reiteradas ocasiones quedó offside.
Muchos pensaron que el dominio inicial albo sería una constante a lo largo de la brega, sin embargo Palestino reaccionó y tímidamente comenzó a generarse ocasiones de peligro en ofensiva. Todo hasta que a los 27 minutos apareció el de siempre, un hombre que está a otro nivel y que hoy se transformó en jugador récord. Hablamos de Lucas Barrios, quien aprovechó una vistosa jugada de Torres y Gazale, para vencer al portero Rogel y decretar el 1 para Colo Colo.
El Monumental era una fiesta. Todos gritaban y se abrazaban, pues el cacique nuevamente se coronaba en su cancha y emergían los gritos reiterativos de “campéon hay un solo”, “Colo Colo es Chile”, “Eterno Campeón” y todas aquellas falacias. Pero de la nada apareció Luis Pavez para silenciar la ruca alba con un cabezazo letal que batió al portero Muñoz e hizo inútil el esfuerzo de Salcedo por evitar la conversión. No era un sueño, Palestino empataba en Pedreros al final del primer tiempo.
El final del lapso inicial dejaba una gran cuota de incertidumbre para el segundo período. Palestino demostró una inesperada vocación ofensiva y se esperaba que en esta etapa se decidiera por ir en busca del gol del triunfo. Por su parte, el silencio se apoderaba de los hinchas albos presentes en el Monumental, pues no se esperaban en ningún escenario el partido que efectuaban los árabes.
Pero la ilusión tetracolor no duró nada, pues a los 50 minutos Daúd Gazale nuevamente desató la algarabía del pueblo colocolino. Pase de Salcedo y el “turco” que se anticipa a un zaguero rival para definir con un suave toque ante la salida del portero Rigel. El albo ganaba 2 a 0 y la anotación era un importante envión anímico, debido a como se presentaba el cotejo.
Palestino ya no era el mismo del primer lapso y Colo Colo se apoderaba lentamente del terreno de juego. Millar se transformaba en figura, pues cada vez que el balón tocaba sus pies, el conjunto albo inquietaba la portería rival. Así llegó el minuto 61, en el cual el “Chino” efectuó una jugada magistral para dejar atrás a 2 zagueros árabes y al portero Rogel, para dejar a Colo Colo en ventaja de 3 a 1. Todo era una fiesta, un carnaval de júbilo, pues el equipo más popular de Chile alcazaba su estrella 28.
El elenco de Luis Musrri no se encontró jamás con el balón y con los cambios efectuados lo único que logró el estratega fue retroceder al equipo. Colo Colo mantuvo el dominio del balón hasta el pitazo final de Chandía. Un pitazo que sirvió para que todo el pueblo colocolino fuera uno solo. Para inscribirse en la historia, situándose entre los 20 equipos más ganadores de títulos locales en el mundo.
La estrella número 28 cayó del cielo enviada por Papa Noel y Marcelo Barticcioto bebe champaña en la copa. Quiéralo o no, el cacique es el campeón y se coronó ante un digno rival como lo fue Palestino. ¡A celebrar albos! Esa es la consigna…
Crack del partido: Rodrigo Millar
Bosta del partido: Jean Paul Pineda
Pato Yañez: Tanto flaite en la cancha recibiendo la copa ¬¬
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